17- Las tres R: reflexión, reencuentro y reconciliación

Zayn se levanta y se dirige a un sitio tranquilo para hacer una llamada telefónica. Mientras tanto los demás están comiéndose el delicioso desayuno preparado por Louis, Harry y Liam.

Los chicos se enteran de la noticia del día debido a que la están retransmitiendo en todos los canales. Todos se preguntan lo mismo, ¿será verdad que están juntos o será solo una falsa noticia? Lo que sí es cierto es que estaban juntos y que Niall se fue porque había quedado con ella, tal y como dijo Harry. Los chicos se miran extrañados, ninguno entiendo nada excepto Harry que está feliz de que eso suceda.

Por su parte, Brit en su casa también está viendo la noticia y no le afecta tanto como ella pensaba que quizás lo haría. Desde que se ha hecho más amiga de Zayn, no piensa tanto en Niall y quizás lo está olvidando. Sin embargo hay alguien que sí lo está pasando realmente mal. Está muy confundida, apenas lo conoce pero no puede negar la atracción que siente hacia él. Ahora se arrepiente de no haberlo besado, quizás así habría descubierto más cosas pero no podía, estaba en el hospital recuperándose de los golpes que su propio padre, el mismo que había intentado matarla, le propinó. En esos momentos no podía pensar en eso, ni en Niall ni en un beso, había sido mucha emoción junta y su reacción fue casi espontánea, no pudo aceptarlo pero ahora gracias a eso, él está distante, frío y además fijándose en Ariana. Si al igual que a ella, él sentía la más mínima atracción, ahora quizás la estaba perdiendo. Ella es la causante de que él se comportara así. Solo se dice tonta.

Unas horas después en un centro comercial, un chico rubio y uno de pelo negro se encuentran hablando en un Starbucks.

-Bueno, ¿me vas a contar qué pasa con Ariana? Supongo que has visto las noticias, ¿estás saliendo con ella?

-No, no he visto las noticias, ¿qué han dicho?

-Anoche os vieron salir de un restaurante muy felices a Ariana y a ti. Lo han emitido hoy. Os preguntaron si teníais un romance y ni confirmasteis ni desmentisteis. Así que ahora te pregunto yo, ¿estás saliendo con Ariana?

-No pero…estoy pensando pedirle salir. Nos hemos vuelto muy cercanos y la verdad es que me gusta…

-No. Tú sabes que no es así, que solo quieres creer eso para olvidar a Debby. Aunque nunca me lo has dicho claramente yo sé que te gusta. Todos lo sabemos. Desde que la conociste no has parado de hablar de ella, de preocuparte por ella y de admirarla. ¿Por qué te haces esto?

-Zayn tú sabes mi secreto…no pienso ir detrás de ella después de que me rechazara, Ariana me comprende, me quiere y está atenta a mí. No tengo que hacer nada para captar su atención y me acepta. ¿Voy a cambiar a una chica como ella por una chica que no me hace caso?

-Vamos tú no sabes que es lo que piensa Debby, ni porque te rechazó. ¿Acaso te has molestado en preguntarle, en escucharla, en tratar de hablar con ella? Yo te entiendo pero tampoco puedes cambiar tan repentinamente Niall. No todas son iguales-se levanta para irse de allí, se ha hecho amigo de Debby y le enfada que su amigo piense así pero antes de irse le dice- Y está claro que te equivocas, yo prefiero mil veces a Debby que a Ariana, realmente a ninguna de las dos las conoces a fondo pero sabes a simple vista quien merece la pena.

En otro lugar de la ciudad, exactamente en casa de Debby ella y su hermana están cuidando de su madre. Aún siente pequeños dolores y está en reposo. Su hermana le pide que la lleve al parque y ella no puede resistirse a esa carita.

Una vez allí Michelle se encuentra con sus amigas y se va a los columpios, al tobogán y a todos los sitios del parque mientras Debby la espera sentada en una fuente. Pero no una fuente cualquiera sino la famosa fuente de los deseos.

Por una calle cercana al parque un chico con unos cascos y una gorra camina dando un paseo, y pensando. Cuando llega al parque se para y medita si entrar o no, el parque era uno de los sitios que más le gustaban desde siempre y desde que no iba como niño a jugar siempre ha sido su lugar de tranquilidad. Ver a aquellos niños jugando sin preocupación alguna, divirtiéndose como sino hubiese mañana, riendo y compartiendo todo con todos sin rencor ni odio le gustaba, le daba paz así que decide entrar. Se sienta en un banco y contempla a los niños, entonces se fija en una particular chica de pelo rubio que le resulta muy familiar. Casualmente la pelota con la que está jugando esa niña se le escapa y va a parar a sus pies. Él la coge.

-Hola, toma aquí tienes pequeña.

-Gracias Niall-él pone cara de asombro, aquella niña sabe su nombre y lo dice como si ya  lo conociera- ¿te acuerdas de mí? Soy la hermana de Debby.

-¡Es verdad! Ya decía yo que me sonaba tu cara cuando te he visto a lo lejos-le dice frotándole el pelo- ¿Estás…estás con tu hermana? Porque no creo que estés tú aquí solita ¿no?

-No-dice riéndose-está mi hermana por ahí. Bueno me voy para allá, adiós novio de Debby...

‘¿Novio de Debby? ¿Por qué su hermana habrá dicho eso?  ¿Le habrá dicho algo Debby? ‘ sonríe.  ‘De cualquier modo, suena bien, me ha gustado’ se dice.

Mira a su alrededor para ver si encuentra a Debby, por un lado quisiera verla y hablar, en cierto modo la conversación con Zayn le ha hecho reflexionar y después de todo tiene razón no le preguntó el porqué de su rechazo, a lo mejor tenía una buena razón. Pero por otra parte no le apetecía, en cierto modo sería ir detrás de ella y estaría rompiendo su promesa, además sería un momento incómodo. De todos modos por mucho que mira no la ve, así que desiste de su idea y se levanta para sentarse en la fuente. En la misma fuente en la que está Debby, pero él está sentado en la parte de atrás, justo detrás de ella.

Debby busca en su bolso su monedero, y saca una moneda. Siempre había creído en que esa fuente concede los deseos que se le piden, aunque a ella personalmente nunca se le había cumplido ninguno, pero ella lo seguía intentando siempre hasta que se le cumpliera. Cierra los ojos, piensa en su deseo y lanza la moneda a la fuente.

Justo detrás de ella el irlandés repite el mismo proceso. Saca de sus pantalones una moneda, cierra los ojos, piensa su deseo y la tira. Abre los ojos y se levanta, esta vez decide salir por la otra entrada así que se dirige hacia donde está Debby, y pasa por delante de ella. Ella lo ve y lo reconoce pero no está segura, lleva la gorra y no le ha visto la cara, podría ser cualquiera. Él va de espaldas pero algo le dice que se gire, y lo hace. Entonces la ve sentada en la fuente. Minutos de silencio e incomodidad, pero ambos dan el primer paso a la vez y se llaman mutuamente.

-No, dime tú primero…-dice la chica.

-No, no, primero las damas-dice Niall volviendo un poco a su carácter de siempre.

-Ah…bueno yo…solo quería saber si…si…es verdad que tú y…-el chico la interrumpe.

-No, ya van dos personas que me preguntan lo mismo hoy. Que salgamos en las noticias donde dicen que salimos juntos de un restaurante no quiere decir nada, yo no quise dar ninguna declaración por respeto a Ariana que no es de este mundo pero mi silencio no indica nada.

-Ah, sí, bueno yo solo era…eso-dice avergonzándose-ahora tú.

-Bueno Debby yo…sé que me he estado comportando muy mal y te pido diculpas y aunque no puedo decírtelo, créeme que tengo mi motivo, algún día lo sabrás. Y bueno, la verdad es que nunca te pregunté y a mí me gustaría saber -se lleva la mano a la nuca y continúa- ¿por qué aquel día en el hospital te retiraste y no dejaste que te besara? Yo entiendo que a lo mejor tú no sentías nada y tampoco me conocías por lo cual, tú…y yo…-empieza a ponerse nerviosa así que ella habla.

-No fue por nada de eso. Es cierto que no nos conocíamos, ni nos conocemos a fondo en verdad. Y tampoco era exactamente porque no sintiera nada solo que…bueno en ese momento, no supe como encajarlo en mi vida. Fueron muchas emociones juntas y eso me bloqueó, pensé muchas cosas a la vez, preguntas a las que no supe darles respuesta, me confundí todo fue mucho para mí y mi reacción pues…fue esa. Lo siento.

-No…no tienes que disculparte. La culpa es mía por ser tan tonto, claro, yo solo pensaba en mí y no pensé por lo que estabas pasando, la verdad es que no se me había ocurrido pensarlo…y ahora todo encaja más y yo…me siento muy estúpido por como he estado contigo este tiempo.

-No te preocupes, yo también te entiendo a ti. Y te creo, algún día seguro que sabré ese motivo y te entenderé aún más porque seguro que tienes que tener una buena razón para haberte comportado así cuando eso va contra tu naturaleza-le sonríe y él también lo hace.

-¿Qué te parece si nos hacemos una foto para sellar este malentendido?-propone él.

-Me parece genial-él saca su móvil y ella hace la foto.